Quincena y en el Banco… Sacrosantas palabras que desde tiempos inmemoriales nos espeluca el alma. Y mientras hago meditación trascendental en el único rincón que pude encontrar, la mirada se pierde, sin pestañeo, hipnotizada y anegada en lágrimas, dirigida a una pantalla que pinta numerosos números que te dirigen a unas cajas vacías, ya que los portadores de los números, hace años partieron o tal vez murieron en la inclemente espera. Mi inconsciente se atreve a susurrarme acerca de la información que aparece a un lado en pantalla compartida (supongo que la idea les vino de aquel aciago día de Abril), cantidad de servicios, información por correo, tarjetas Dorada, Platinum, pero si quiero solicitar alguno tengo que tomar otro numerito y fijar la mirada en otra pantalla… Una gota de sudor brilla en mi frente, el calor no es normal, a Dios gracias la H1N1 ya no está, sin embargo, no falta el que estornuda estruendosamente con el fantástico efecto de piedra en laguna, logrando el al...
Espero que este Blog, sirva como foro de ideas y opiniones que ayuden a compartir lo que sentimos y no discutimos, en una Venezuela de sueños robados