Y Mañana 13 son 49

Entre mis muchas “Inactividades” cotidianas, he querido dejar un espacio para la reflexión y la mesura, un momento en el cual me abstraigo del tumulto diario, excesivamente adobado con ingredientes de violencia, recesión, crisis espiritual, inseguridad y fogosidad electoral, esta última, la 14va. en 14 años y la segunda presidencial  en 6 meses…

Un mar de pensamientos y recuerdos inundan a mi cerebro, momentos antes de actuar presto en una elección más…

Y lo digo en plena conciencia de que es una elección más, porque en TODAS me he jugado mi futuro, el de mi familia y conciudadanos.

NO puedo dejar de pensar, en que antes de 1999 mis sueños estaban enfocados en el desarrollo de una carrera, de un empleo, de hacer las cosas que me gustan y obtener los bienes que con mi trabajo merecía.

Hoy miro al risueño muchacho de los 90, lleno de ambiciones, sueños y me impresiona en el sobreviviente en el cual me he convertido.

Pérdida de mi empleo, el peregrinaje en la búsqueda de otro, el no conseguir, posponer los hijos con los que soñé por no sentirme capaz de darle lo básico, ser estafado por el amigo, ser mantenido por la abnegada mujer que me acompaña y surgir de mis cenizas, 14 años más viejo físicamente, pero con el espíritu rejuvenecido por el ejercicio de la lucha.

Cuantas oportunidades dejé pasar por no vender mis ideas ni arrodillar mis valores…

Pero

heme aquí, sin los hijos que siempre quise, pero con la piel curtida por la inclemencia de los tiempos vividos, sacando mi propio sueño de las cenizas de la vorágine comunistoide, creciéndonos en la adversidad, adaptándonos.

Heme aquí parado de frente al espejo de mi vida, orgulloso de la dura imagen que veo, la del hombre que  vive los principios inculcados en el hogar de unos padres maravillosos y de amigos en el seno de una iglesia, que con todos sus errores, tuve la fortuna de conocer su mejor cara.

 La imagen de un hombre que se ha empeñado en dejar la mejor de las huellas en las personas que ha tenido la fortuna de conocer y que hoy puedo mirar la sonrisa en la cara de los que me recuerdan.

La imagen de un hombre orgulloso de su pasado, luchando su presente y cultivando su futuro… la vida es una eterna siembra y cada día una oportunidad de recoger nuestra cosecha.

Mañana cumplo 49 años, y como le dije en la cola a mi esposa esta madrugada, en verdad he vivido una vida plena. Carajo! Dura pero plena. Miro en el espejo y veo a un hombre que se ha ganado todo y a todos con el sudor de su alma.

Yo duermo tranquilo, el sueño que merece todo ser con la conciencia limpia por ser el mismo por todos lados, en todos lados y siempre.

El domingo voy a Votar, y mi decisión es sencillita, votaré por el cambio… no sé si será lo mejor pero lo que sí sé es que será diferente, no sé si en un año mi lucha continuará, pero lo que les puedo garantizar es que mi mano siempre se alzará en contra de la injusticia, en contra de la violencia, en contra de todo aquello que se fundamente en valores contrarios al Amor, la Paz y la Armonía, sea del color que sea.

Si algo he aprendido en estos años es que, nada que no esté fundamentado en la unidad, en la inclusión y en el amor, amor verdadero, ese amor único que implica en la entrega total por amigos y enemigos, fundamentado en el bien común, puede terminar bien.

El domingo votaré en contra de la postergación… porque simplemente no tengo toda una vida por delante para vivirla… ¡Solamente tengo mi hoy! Y en mi hoy no puedo salir de noche porque nos pueden robar la cartera y el mañana. En mi hoy veo a mi hermano motorizado como una amenaza a mi integridad, a la de mi gente, a la del carro o celular que tanto me han costado obtener.

En mi hoy Valencia y Maracaibo siguen sin su Metro en tantas Campañas reinaugurado.

En mi hoy sigo luchando para pagar una costosa póliza de Hospitalización porque no quiero morir en un hospital público.

En mi hoy tengo que parir impuestos para pagar servicios que no tengo ante el riesgo de perder la empresa que tanto me ha costado hacer y de dejar sin ingresos a los que creyeron en mí y dependen de mí.

En mi hoy no hay nuevas empresas y el estado se convirtió en un Productor de miseria y desempleo.

Mañana cumplo 49 años, ya me arrebataron un 13 de Abril, pero me niego que me arrebaten otro, pasado mañana voto y solo espero que el 15 de Abril comience una nueva lucha, una lucha sin tanto aire viciado por la corrupción de unos pocos, con sus camisas rojas blindadas como blindadas son sus camionetotas y su ejército de escoltas.

El Lunes tengo  49 años y como dijo el Flaco desde su injusta prisión, amaneceré “Con más Futuro que pasado”, con otra lucha para Bien o para Mal. Pero seguiré luchando.

Porque creo que hay más gente buena que  mala y cuando digo esto lo hago en el recuerdo de aquellas palabras de mi Abuela Panchita, “es que el bien se reconoce porque se ve, sabe y huele a bien”.

Solo un ambiente de Paz y Justicia puede abonar el desarrollo social y el progreso, es simplito, ese ambiente no genera distracciones y hemos pasado 14 años distraídos.

Ya es hora de dejar las distracciones, que las ideologías no hacen falta para trabajar y progresar. El pan de mi mesa no lo trae un color sino mi sudor.

El Lunes tengo 49 años y solo quiero como regalo un Sol que caliente a todos, una luna que ilumine nuestros sueños tranquilos y una tierra llena de progreso, de paz y de millones de personas conscientes de que somos una sola raza, somos solamente seres humanos y somos VENEZOLANOS!!!

No puedo terminar sin agradecer al Flaco Henrique Capriles, @hcapriles, porque has “dejado el pellejo” en esta doble batalla,  como tu bien has dicho. Porque me consta que tú al igual que millones de venezolanos tenemos 14 años dejando el pellejo cada día para poder vivir.

Gracias Flaco, tu hiciste tu parte, pasado mañana hacemos la nuestra con la fe y la esperanza de que a partir del 15 de Abril seamos una sola nación con una sola realidad y esa realidad se llama VENEZUELA!

“Vamos Cumpa Carajooooo que para amanecer no hacen falta gallinas sino el cantar de gallos”

Gracias por leerme, se les quiere a TODOS… con corazón de Venezolano, porque #YoSoyVenezolano!

Reinaldo Poleo